jueves, 20 de septiembre de 2007

ENAMORADO DEL PLANETA TIERRA


El otro día veía en Discovery Channel un documental sobre la expedición al planeta Marte, al cual el hombre pretende llegar e instalarse como lo hiciera Colón cuando descubrió América. Nunca he estado en Marte pero hasta hoy doy gracias a Dios por haber nacido en este bello planeta. Para muchos la Tierra atraviesa la peor crisis mundial, pues el calentamiento global, la contaminación y la desaparición de los enormes bloques de hielo han practicamente desausiado a nuestro querido planeta, lamentablemente no es querido por todos al parecer.



No soy agrónomo ni mucho menos ecologista, estudio para periodista y no dudo en ayudar a mi Planeta, tenemos un ecosistema maravilloso, una enrome diversidad de flora y fauna en todas partes del mundo, los recursos naturales más imprecionantes que los descomunales planetas del sistema solar, una biodiversidad que ningún planeta posee.






Y somos nosotros mismos los que nos dedicamos a hacerle daño a quien por mucho tiempo nos brindo de comida y hogar, nuestro planeta representa nuestra primera morada, nuestro sustento de vida, una posible destrucción es lo que deberiamos priorizar antes que cualquier cosa. Los científicos nos han dado menos de 50 años de vida, nuestras futuras generaciones no podrán disfrutar de los paisajes verdes y de los campos llenos de vida. Saben mi familia creció en el campo, rodeado de lagos, lagunas y puquiales, arboles de sauce y eucalipto, enormes pampas, y plantas que adornan el panorama en primavera, que despiden un olor agradable en invierno, ¿quién no disfruta el olorcito de hoja mojada tras una intensa lluvia?, ¿Sabían que ver mojarse a una planta puede ser tan exitante como hacer el amor?, ¿a quien no le gusta que el agua sea pura y cristalina?, donde uno pueda hasta darse el gusto de chapotear como un pez más en el agua.





¿Acaso no disfrutas viendo a tus hijos correr por el campo? y despreocuparte si sufren una caída ya que sabes que el verde pasto lo amortiguaría. Y que podemos decir de nuestros animales? aquella forma de vida tan extraña y fascinante que lleva cada especie única que convive con nostros día a día. Desde peces, mamíferos, reptiles e insectos, San Martín se quedó fascinado con las aves flamengas cuyos colores rojo y blanco adornan las lagunas de sudamérica. Esa exquicita variedad de vida animal que sólo la aprecias en el continente africano, los majestusos paisajes que se pusieron solos ahí, nadie los colcó en lugar donde están son producto de muchos años de cambio y evolución, las maravillas naturales como los ríos amazonas o Nilo, los bosques llenos de animales salvajes y hasta los extraños animalitos urbanos que conviven con nosotros y que a veces nos generan dolores de cabeza y repudiamos. Todos ellos tienen derecho a reclamarnos por lo que venimos haciendo, lamentablemente a nuestro planeta le queda poco tiempo de vida, hagamos que su final sea un poco más prolongado, cuidemos de una buena vez y a conciencia nuestro medio ambiente.




Se que mi planeta es fuerte, y se que sabra salir adelante, no nos dejemos vencer por las amenazas y nos amilanemos con los castigos de la madre Naturaleza. No hechemos la culpa a Dios, no es Dios el que anuncia el fin del mundo, somos los hombres que le pusimos fecha a tal final, pero no se asuten, que yo les aseguro que mientras haya un pedacito de verde brotando de la tierra, habra vida, esperanza y un futuro bello que disfrutar. Cuidemos pero en serio nuestro planeta.